«Necesitamos apostar por un turismo más consciente de que las islas Canarias son Reserva de la Biosfera»
Desde Drago Verdes Canarias hacen frente a las elecciones en un escenario en el que el resto de los partidos tienen una marca conocida, una estructura consolidada y años de experiencia. En la actualidad, ¿qué problemas consideran prioritarios de solucionar para la sociedad canaria?
Canarias es un archipiélago y eso ya conlleva un tratamiento especial de nuestra sociedad porque, por ejemplo, la movilidad es diferente a la de otros territorios. Ahora mismo tenemos un problema de transición energética, aparte de la vivienda y, por supuesto, la sanidad, que siempre es precaria. De hecho, parece que hay un interés en debilitar nuestro sistema público para favorecer a la sanidad privada.
Como le decía, el territorio necesita de una protección que a veces se nos olvida en favor del mercado. Nuestra principal industria -como la llaman- es el turismo, pero a veces se nos olvida que primero tenemos que proteger el planeta Tierra y el cachito de tierra que nosotros pisamos, que son estas islas.
Por su parte, sabemos que la problemática de la vivienda ahora mismo está en auge y es, precisamente, porque viene más población a residir a aquí. Creo que hay que atajar los problemas desde varios puntos, pero sobre todo, se debe centrar la cuestión en pararnos y analizar la situación, así podríamos arreglar varios frentes.
¿Qué opinión le merece a usted el modelo turístico actual?
Desastroso. Seguimos basándonos en un modelo turístico de los años 70. Por ejemplo, aquí en Fuerteventura seguimos teniendo hoteles construidos en los años 70, que en su momento contribuyeron a que los majoreros salieran adelante, pero es que hoy en día no podemos seguir alimentando al mismo buitre. No podemos seguir alimentando a los grandes empresarios, porque la gente trabaja, pero tampoco trabaja en tan buenas condiciones. Tenemos que diversificar la economía y el turismo siempre va a estar, pero de otra manera. Necesitamos apostar por un turismo más consciente de que las islas Canarias son Reserva de la Biosfera, de que son un territorio delicado donde tenemos biodiversidad que hay que proteger. Yo creo que el turismo que nosotros necesitamos es un turismo que venga a observar y a proteger. Siempre vamos a tener turismo de sol y playa, pero el turismo de Todo Incluido debería eliminarse totalmente, porque esa gente no sale ni del hotel para consumir en nuestros establecimientos.
Por su parte, veo innecesaria tanta promoción financiada públicamente en el exterior para seguir atrayendo turistas. No hace falta, Canarias se ha vendido ya demasiado y se vende sola. No nos hace falta seguir alimentando a la misma bestia.
Por su parte, ¿por qué modelo económico abogan?
Nosotros necesitamos que el turismo sepa a donde viene, no podemos permitir que entren a determinados Parques Naturales, algunos que son nacionales y otros que todavía no lo son, a destrozarlos.
Aquí en Fuerteventura no tenemos ningún Parque Nacional, pero tenemos destrozos en piedras milenarias, incluso en areniscas que llevan formarse miles de millones de años donde escriben con su ego por encima de todo. Yo creo que lo que tenemos que hacer es fomentar que en el caso de que haya que hacer hoteles, que sean pequeñitos, donde la gastronomía sea de km 0, donde no se favorezcan las importaciones, que se haga todo con conciencia. Tampoco es tan difícil.
«El territorio necesita de una protección que a veces se nos olvida en favor del mercado»
Asimismo, ¿qué opinión le merece la situación actual de la vivienda en Canarias?
En este caso hay que incidir en la vivienda vacacional. Para que una persona que tiene una vivienda y se quiera ganar algo de dinero con la misma alquilada tendría que verse dónde está esa vivienda y si molesta a los vecinos. Estamos viendo muchos casos de viviendas vacacionales que no están registradas oficialmente, pero que las puedes alquilar. Pedimos control.
Hay que mediar para que las personas que tienen viviendas las pongan en alquiler para las personas trabajadoras con unos alquileres razonables, no podemos aspirar a los sueldos de los europeos. Estamos viendo alquileres de 800, 900 y 1.000 euros, ¿dónde van a vivir los trabajadores?
Por supuesto, hay que hacer vivienda pública con alquileres populares que nos podamos permitir, siempre intentando que las personas puedan vivir por ellas mismas, no pretendemos vivir en una Canarias donde todo el mundo necesite de ayudas públicas, al revés, necesitamos que las personas puedan ser independientes, que si pueden comprarse una casa que lo hagan, si la pueden construir que lo hagan dentro del marco legal para no fragmentar más el territorio, pero sobre todo lo que más miedo da es la gentrificación, lo que todo el mundo conoce como “ya no conozco a mis vecinos”, porque hay fondos buitres que compran edificios enteros y los ponen a disposición de la vivienda vacacional o con alquileres altos para los nómadas digitales u otras personas que ni siquiera cotizan en España, cotizan en otros países y tienen unos sueldos más altos.
¿Con qué apuestas se presenta usted como candidata al Parlamento de Canarias por Fuerteventura?
La sanidad en Fuerteventura está colapsada, este es un problema que siempre reclamamos: más presupuesto para la sanidad pública en Fuerteventura.
No obstante, hablando de Fuerteventura, es momento de parar, de analizar la situación, de considerar la capacidad de carga, porque mucho político que estoy oyendo últimamente dice: “sostenibilidad”, “crecimiento sostenible”, “capacidad de carga” y no sabe la capacidad de carga, porque no la sabemos ninguno. Debemos tener en cuenta los recursos de cada isla y esta isla donde yo vivo -Fuerteventura- es una isla desértica que no tiene recursos hídricos, la comida la tenemos que importar, 1 de cada 3 personas que encontramos en las calles es turista, estamos comiendo -metafóricamente hablando- por encima de nuestras posibilidades.
Lo que a mí me da miedo de Fuerteventura es que se siga haciendo daño a la gallina de los huevos de oro, que sigan sacándole jugo. Dicen que la previsión es subir hasta los 185.000 habitantes, ahora mismo tenemos 126.000, pero tenemos que contar con los turistas, que ahí no están previstos: recibimos 2 millones de turistas al año. 2 millones de personas a las que no contamos dentro de los recursos sanitarios, que si se caen hay que atenderles, pero no hay camas para tanta gente. A parte, tenemos que contar con que no hay agua y con que la comida, casi toda, la traemos de fuera, con la consecuente emisión de gases de efecto invernadero, que se supone que a nivel mundial lo estamos luchando, pero aquí se hace lo contrario y cada vez queremos más cruceros y más aviones. En fin, es insostenible a más no poder.
