El Grupo Martínez Abolafio apuesta por la calidad y mejora de servicios en su oferta turística para conseguir un reposicionamiento de Lanzarote
Es imposible comenzar una entrevista de este tipo sin hacer un balance de un 2022 marcado por un contexto económico delicado, pero con, parece ser, buenas perspectivas turísticas. ¿Cómo lo habéis vivido?
Empezamos el año plagado de incertidumbre por el Covid-19. Recuerdo que en FITUR nadie del sector tenía idea sobre cómo evolucionaría el mercado. Considero que hemos tenido un año 2022 que ni los más optimistas esperábamos, así que muy agradecidos a todos los turistas que nos han elegido como destino para disfrutar de su tiempo de ocio.
Después de dos años de restricciones, la alegría ha vuelto al turismo con recuperación en ocupaciones y ADR. En lo negativo, los incrementos de costes (alimentación, energía…), y los posibles efectos de la inflación y subida de tipos de interés en la renta disponible de los turistas. Con todo, esperamos un 2023 razonablemente bueno.
Lo cierto es que Lanzarote no solo tiene buenas cifras, sino un ticket medio alto, lo que supone siempre un buen perfil de turista, ¿no es así?
En un mercado con cifras entorno a 3 ó 3,5 millones de turistas, la mayoría de Reino Unido e Irlanda, hay un poco de todo. Cierto es que en Lanzarote estamos trabajando en el reposicionamiento turístico de la Isla, intentando atraer un perfil con mayor poder adquisitivo. Que aprecie la calidad de nuestra oferta turística y los atractivos naturales de la Isla que, sin duda, es el mejor producto.
Es un proceso largo y que llevará tiempo, pero es el camino que nosotros consideramos correcto.
¿Cuál es la oferta alojativa ahora mismo del Grupo y en qué se diferencia?
En 5 estrellas La Isla y El Mar y Villas Alondra. En 4 estrellas, Pocillos Playa, Apartamentos Guinate y Arenas de Son Bou (en Menorca).
Los esfuerzos del Grupo se centran en el segmento de 5 estrellas donde tratamos de tener el mejor producto y el mejor servicio en su categoría, sea Hotel (La Isla y El Mar) sea Villas (Alondra). Si observamos la reputación que nos asignan nuestros clientes en las webs de referencia podrán ver que vamos por el camino correcto.
¿Por dónde han ido los esfuerzos turísticos del Grupo durante este año? ¿Dónde se han centrado más?
En la calidad y mejora de servicios. Si aspiramos a captar clientes con un perfil alto, debemos ofrecer servicios y productos acordes a las exigencias del turista.
Estamos convencidos de que apostar por la calidad es lo que nos llevará a los mejores números posibles en el medio y largo plazo. Decidimos sacrificar rentabilidad a corto plazo por la mejora de productos y servicios. Estamos en el turismo porque queremos mejorar constantemente nuestros hoteles y así contribuir a la mejora del destino y de la sociedad de Lanzarote. Asimismo, la apuesta por la calidad nos permite ofrecer desarrollo personal y profesional al equipo humano. Sin un personal comprometido y satisfecho es imposible obtener clientes satisfechos.
Nos hemos centrado en reformar Villas Alondra, 47 villas de lujo, incorporando las últimas tecnologías en domótica, gestión energética y medioambiental. Queremos posicionar el concepto Alondra como un referente en el sector de Villas de Lujo.
En La Isla y El Mar, por su parte, hemos venido desarrollando un programa de mejora de servicios que trata de cubrir toda la experiencia e interacción con el cliente. Con gran éxito a efectos reputacionales.
Además, hablamos de una oferta complementaria potente, ¿verdad?
El Grupo ha decidido invertir en actividades complementarias como restauración y golf. Gestionamos desde el año 2022, el Campo de Golf de Tías, donde estamos finalizando una inversión de mejora muy significativa.
Esperamos que el Campo y su nueva Casa Club, con un restaurante de primer orden, La Honorable, se convierta en un punto de encuentro y de referencia para la sociedad de Lanzarote y para los que practican este deporte. En restauración, contamos también con el restaurante Kentia, ubicado en La Isla y El Mar, que ofrece cocina moderna y creativa.
¿Qué tiene Lanzarote que está de moda frente otros destinos?
Lanzarote se convierte en el destino predilecto de sus visitantes por su particular personalidad. Es una isla que te atrapa y que va más a allá de lo que se pueda encontrar en cualquier destino de sol y playa.
Su esencia es un perfecto compendio de paisajes, gastronomía, cultura y deporte. Diría que es una tierra en la que puedes encontrar todo, desde el vocerío de los grupos más turísticos, con su magnífica oferta hotelera y zonas de ocio, arte y naturaleza; hasta el espacio más sosegado sin indicio alguno de vida humana.
Sin duda, sus características la convierten en un destino versátil. Lanzarote es para toda persona que busque un lugar en el que disfrutar y sentirse como en casa.
¿Hay buenas expectativas para 2023?
Aunque la situación económica europea y de Reino Unido, principal mercado de Lanzarote es ciertamente más complicada que en el 2022, nosotros somos razonablemente optimistas. Entendemos que el turista que demanda experiencias y servicios de calidad continuará viajando y creemos que nuestros productos son de los que están mejor posicionados en ese segmento.
Por otra parte, esperamos que los incrementos de costes, derivados de la guerra de Ucrania, suavicen su impacto en el 2023 y nos permitan tener un año turístico saludable, aunque quizá no en los niveles del 2022.
Y si hablamos de 2023, ¿qué planes o proyectos tiene el Grupo?
Este año podremos presentar nuevas incorporaciones a nuestra oferta turística que, sin duda, estarán a la altura de las exigencias del público objetivo que queremos atraer a Lanzarote.
El primer hito será la inauguración de la Casa Club, junto a su restaurante La Honorable y el campo de golf renovado.
En unos meses inauguraremos César Eco Hotel, un proyecto único en Lanzarote y en Canarias. Un hotel boutique de 5 estrellas que ofrecerá a nuestros clientes unas experiencias inmersivas en el mundo rural de Lanzarote. Un establecimiento que respeta la tradición y la combina con las últimas tecnologías y el mejor servicio posible. También, con un restaurante de cocina tradicional canaria con toques de modernidad.
