“El valor añadido que aporta la D.O. es garantizar al consumidor que existen unos controles sobre ese producto que va a degustar”
¿Bajo qué objetivos nace el Consejo Regulador D.O. de Lanzarote?
El Consejo Regulador D.O. Vinos de Lanzarote nace con el objetivo de velar por el origen y la calidad de nuestros vinos, así como para realizar una promoción conjunta que ayudará a posicionar y diferenciar el nombre “Vinos de Lanzarote”.
De hecho, según nuestros estatutos aprobados por la ORDEN del 06 de febrero de 2008, la representación, defensa, garantía, investigación y desarrollo de mercados y promoción, tanto de los vinos amparados como del nivel de protección, así como la prestación de servicios relacionados con estas actividades, son objetivos del Consejo Regulador.
¿Qué valor añadido aporta esta Denominación de Origen?
El valor añadido que aporta la D.O. es garantizar al consumidor que existen unos controles sobre ese producto que va a degustar y/o consumir. Es decir, se le garantiza que el producto es de la zona que pone la etiqueta, que la uva ha sido recogida en la zona de protección de la D.O. que en el caso de Lanzarote es de ámbito insular, que tiene una calidad organoléptica y analítica determinada, siguiendo el reglamento y el Pliego de condiciones de la D.O.
Asimismo, hablamos de vinos que han sido premiados. Por ejemplo en los Decanter World Wine Awards 2022. ¿Con qué características cuenta la isla de Lanzarote para que se produzcan estos vinos dignos de ser galardonados?
La isla de Lanzarote cuenta principalmente con su clima, suelo y variedades, que hacen que nuestros vinos sean diferentes y, por lo tanto, consigan estos galardones de renombre.
El rasgo más relevante en la climatología de Lanzarote es su aridez. Esta viene determinada por la escasa altitud y su orografía homogénea, cualidades que impiden que se alcance la cota de inversión del alisio y, como resultado, no se produce interceptación del mar de nubes ni la consecuente descarga de humedad.
La temperatura media de la zona geográfica es de 20o C, con variaciones térmicas entre los meses más fríos y los más cálidos, siendo la diferencia media de temperaturas entre enero y agosto de alrededor de 7o C.
La precipitación media anual es inferior a 150 mm.
Debido a la escasez de barreras geográficas y a la influencia, tanto de los vientos alisios como de las brisas marinas, el viento es un factor característico de Lanzarote en particular, siendo además casi constante a lo largo de todo el año. La dirección del viento que predomina es la N-NE.
La humedad relativa como variable climática puede ser considerada relativamente alta. La escasa nubosidad, característica generalizada a lo largo de todo el año, favorece el elevado número de horas de radiación solar. Los suelos en los que se asientan los viñedos son suelos volcánicos. La capa lapilli o “picón” cubre el suelo vegetal de la viña, facilitando la rápida filtración de la lluvia, evitando la evaporación de la tierra vegetal y manteniendo constante la temperatura del suelo (efecto termorregulador). La forma de cultivo en Lanzarote, no permite el uso de maquinaria, por lo que las labores se desarrollan de forma manual, además imposibilita el empleo de densidades de plantación altas, con el escaso rendimiento que esto conlleva, obteniéndose producciones bajas pero de calidad.
No cabe duda, en un clima subdesértico, como el de Lanzarote, agudizado por los abrasadores vientos saharianos, y en una tierra de naturaleza volcánica, el fomento de la viticultura como un ser vivo requiere agudeza, tesón y originalidad. De ahí que sean los viñedos más singulares de la geografía española, unos enterrados en hoyos en forma de embudos, para que las raíces encuentren tierra fértil, otros protegidos de los vientos por muros semicirculares de piedra volcánica. Todos, en cualquier caso, acolchados por una capa de ceniza volcánica (picón o lapilli), para que retenga la humedad ambiente.
Esta forma de cultivo hace viable la supervivencia de las vides en un suelo volcánico y ha permitido la presencia de una variedad autóctona, la malvasía volcánica y la adaptación de las variedades viníferas, que proporcionan vinos en los que el equilibrio volcánicomineral-acidez está perfectamente conseguido y constituye la característica diferenciadora del vino de Lanzarote.
¿Están promoviendo esta D.O. en redes sociales o fomentando acciones de cara a su público objetivo?
Sin lugar a dudas. Llevamos más de 7 años desde que la D.O. Vinos de Lanzarote hizo una apuesta decidida por la promoción a través de las redes sociales. Para ello contamos con una empresa externa responsable de dicha dinamización, así como de la coordinación de todas las actividades de promoción y formación (cuentacuentos, senderismo, experiencias enogastronómicas, cursos de formación en viticultura y cata, taller de pintura con vino, yoga y vino, Sonidos Líquidos, asistencia a ferias, etc…).
¿Qué pasos pretende dar este Consejo Regulador en los próximos meses?
En los próximos meses seguiremos en la línea de promoción de nuestros vinos. Para ello, como actividad más inmediata tenemos la celebración de la Semana Malvasía del 07 al 13 de noviembre, una semana completa de distintas actividades. Seguiremos con la campaña de Navidad y al inicio del año, retomaremos los cursos de formación y el resto de actividades (senderos, cuentacuentos, etc…).
Con respecto a nuestros viticultores y bodegueros, seguiremos con la tramitación de las ayudas del POSEI que cada año se convocan, así como, realizando las gestiones necesarias para que se les pueda resolver su registro vitícola y los viticultores no tengan problemas con el cobro de sus ayudas. El trato directo a viticultores y bodegueros es nuestro día a día.
